Lo que no nos gustó

Una de las cosas que no nos agradó y que uno de los guías nos contó, fue lo que pasó con Egoyá. Muchos de nosotros no lo sabíamos pero Egoyá es una quebrada que inicia desde La Rebeca y termina en Turín, resultó que antiguamente la población se formó alrededor de esta quebrada y para hacer mas espacio público empezaron a tirar cualquier tipo de escombros y cosas hasta taparla y volverla lo que ahora es una gran calle de la ciudad. En consecuencia de esto se formó una falla geológica que hoy en día abre huecos, el agua empieza a filtrarse y resquebraja las calles lo que desestabiliza las edificaciones. Este hecho nos pareció muy triste ya que solo por la necesidad de mas calles eliminaron una de las quebradas de la ciudad y la volvieron un canal donde van a parar las aguas sucias de la ciudad.

Con respecto al recorrido como tal no nos gustó que los guías se paraban a explicar en lugares muy poco espaciosos y por ser un grupo un poco grande nos volvíamos un estorbo bastante molesto para el resto de peatones de la ciudad. Tampoco agradó mucho que como íbamos un poco de afán para que el recorrido no se extendiera, la guía nos hacía tirarnos a los carros prácticamente por la impaciencia de esperar el semáforo en rojo. Básicamente fueron las únicas cosas malas por recalcar de este recorrido.